Como era de esperar, el multijugador de Max Payne sigue la pauta marcada por otros títulos de acción. Lo primero es la posibilidad de personalizar nuestra apariencia, desbloquear armamento, mejoras, y clases configurables. Todo con un sistema de progresión por niveles, en el que iremos avanzando según consigamos experiencia al jugar. Esto ya es todo un clásico en el género de la acción. En el apartado social se potencia que los jugadores se asocien en clanes. Ya que si juegan juntos obtendrán bonificaciones especiales. A parte, tendremos los ya consabidos modos deathmatch y team deathmatch. En todos los tipos de juego tendremos que escoger si queremos jugar con puntería asistida o manual.
Aquí viene uno de los puntos negativos, y es que el control en multijugador se hace a veces un poco complejo, restándole puntos a la jugabilidad. Este detalle hace que la jugabilidad en los modos normales se resienta bastante. Por no decir que debido a los pocos mapas que hay, se pueda hacer bastante repetitivo jugar. Pero es en el modo de Gang Wars donde encontramos por fin el principal aliciente de Max Payne 3, y donde Rockstar ha aportado un interesante punto de innovación en el sector. En este modo de juego, se combina la riqueza narrativa de la campaña de un jugador con el potencial de juego multijugador.
Video de jugabilidad multijugador parte 1
Jugaréis cuatro rondas, con diferentes objetivos que variarán dependiendo de lo que pase en cada uno de ellos. Desde reclamar un territorio, desactivar bombas o asesinar a un líder escogido aleatoriamente del equipo contrario. Todo ello permite sumar puntos para la ronda quinta final, que siempre resulta ser un todos contra todos. Una parte central de este modo son los Bursts, que funcionan como mejoras que ofrecerán ventajas a los miembros de nuestro equipo. Ya sea aumentando el calibre de nuestras armas o bien induciendo la paranoia en los enemigos, haciendo que sus compañeros aparezcan como enemigos. Como podéis ver las posibilidades son muchas y el potencial de diversión aumenta exponencialmente. Y todo ello con unos tintes narrativos que dan una mayor profundidad al juego, más que liarse a tiros una y otra vez.
Video de jugabilidad multijugador parte 2
Está claro que el multijugador de Max Payne 3 tiene sus claros y oscuros y que, salvando el modo de Gang Wars, que es realmente notable, queda mucho por hacer para que destaque respecto a la competencia. La buena noticia es que la gente de Rockstar ha confirmado ya que van a centrarse en desarrollar nuevos contenidos centrados en el multijugador. Está claro que quieren apostar fuerte en este aspecto y esperamos ver los primeros resultados a lo largo del verano. Ya solo por el modo Gang Wars vale la pena que probéis el multijugador, y si encima os decimos que vendrán muchas novedades, no hay excusa. Preparad vuestras armas favoritas y a liarse a tiros con Max Payne 3 se ha dicho.