Para empezar, como ya hemos mencionado, decir que los gráficos son excelentes. Desde la cinemática de presentación, pasando por el diseño de los personajes, las animaciones, y hasta la interfaz de usuario, todo ha sido diseñado de una manera excepcional. Ankama ha hecho un trabajo increíble con este juego. Obviamente se sirve del estilo artístico de los juegos que dan vida al universo en el que se sitúa la acción, pero han conseguido crear un título único y muy adictivo que diferente bastante de los anteriores.
Se engloba en el género de los juegos de cartas y estrategia, pero añade su propio componente al incluir un tablero de cinco líneas sobre el que los jugadores invocan criaturas y unidades. A cada lado hay varios “dofus”, una especie de huevo cuya destrucción es el objetivo final. Cada huevo tiene cinco puntos de vida y hay que destruir dos para obtener la victoria. Utilizando las cartas de invocación, sobre el tablero aparecerá una criatura que avanzará con cada turno de manera automática, atacando a lo que sea que se ponga en su camino. La estrategia, contando con cinco líneas, reside en atacar y defender al mismo tiempo.
Otro elemento interesante es que de los huevos que se encuentran a ambos lados del tablero, dos son falsos. Y no se puede saber cuáles. Al destruirse estos, lo que ocurre es que la zona en la que se colocan unidades se agranda. Y también cuenta con mecánicas adicionales sobre el tablero, acciones adicionales que se desencadenan cuando una criatura llega a la posición. Estas acciones son del tipo “saca una carta adicional del mazo” o “aumento de ataque”.
El tutorial de iniciación está muy bien hecho y enseña las mecánicas básicas de manera muy efectiva. En líneas generales, Krosmaga se juega igual que otros juegos de cartas (Hearthstone, Faeria, Hex...), pero su tablero y su ambientación dentro del universo de Dofus lo hace realmente destacar como único. Los desarrolladores no han inventado la rueda, tampoco es el culmen de la originalidad, pero el nivel de detalle y el cuidado que se ha puesto en su desarrollo lo convierten en un título impecable. Todavía se encuentra en fase de pruebas, pero recibe nuevo contenido de manera constante. Si eres un jugador en busca de un nuevo CCG, sin duda merece la pena probarlo.
El único punto negativo de nuestra experiencia de juego para escribir este artículo fue nuestra incapacidad para ganar una partida. Tras el tutorial nos vimos con suficientes monedas para desbloquear un nuevo personaje, por lo que nos decidimos por Xelor, el dios del tiempo, quien sobre papel parece contar con mecánicas muy interesantes y complejas en las cartas a su disposición. Se da el caso de que, precisamente por esto, está marcado con dificultad 3/3. Con él en nuestras manos inexpertas, nos fue del todo imposible obtener una victoria. De alguna manera, parece difícil poder desarrollar todo el potencial de un personaje hasta que uno se hace con cartas concretas.
El juego cuenta con misiones y la posibilidad de deshacerse de cartas para obtener componentes con los que crear nuevas. También dispone de una tienda en la que comprar packs de cartas y un sistema de logros que permite obtener bonificaciones y recompensas.
En conclusión, pese a estar en beta cerrada, el juego ya cuenta con mucho contenido. Es un título que hará las delicias de aquellos que disfrutan de los juegos de cartas y que conocen el universo de Dofus, pero puede jugarse también sin ser un gran conocedor del mundo que rodea a los juegos de Ankama. Las mecánicas son sencillas, pero, en palabras de Ankama, se busca llegar a una audiencia mayor (y más joven).
